Vedran Smailović,
músico de la Filarmónica de Sarajevo, durante 22 días se sentó en la
calle a tocar el Adagio de Albinoni, en honor a las 22 personas que vio
morir en el bombardeo de una panadería de la ciudad bosniana de Sarajevo
entre la segunda mitad de 1992 y principios de 1993.
4 comentarios:
Los nacionalismos (y todos los demas -ismos) siempre han sacado lo peor de cada uno.
Por suerte siempre nos quedará la cultura (o eso queremos creer).
Un abrazo desde el túmulo
Así es, acuerdo absolutamente.
Voy a visitarlo ya.
Cariños.
se puede ser valiente sin un arma o un ejército a tus espaldas.. quién lo diría en estos tiempos que corren...
Siempre habrá héroes.
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